Astronautas
Por: Viviana Márquez, estudiante de Matemáticas la Konrad Lorenz Fundación Universitaria e integrante del grupo de astronomía Astro-K.
Imagen: Estampa conmemorativa sovietica. Fuente: Old The Moscow Times.
El homo sapiens, desde que levantó su mirada al cielo y descubrió el Universo, deseó con vehemencia conocer el espacio exterior debido a su naturaleza curiosa y su necesidad intrínseca por adquirir conocimiento.
Desde tiempos prehistóricos, el ser humano contempló el vuelo de las aves. Sin embargo, durante muchos años, la idea de salir fuera de la Tierra perteneció exclusivamente a la imaginación y a la ciencia ficción, ya que se consideró que volar era una hazaña imposible dadas nuestras limitaciones anatómicas.
No obstante, el anhelo milenario de conquistar los cielos permaneció vivo a través del tiempo y las diferentes civilizaciones. Se vio reflejado a lo largo del tiempo en la mitología (por ejemplo, Ícaro y Dédalo), el arte (como los diseños de Leonardo Da Vinci), la literatura (De la Tierra a la Luna por Julio Verne 1865), e incluso el cine (por ejemplo, Una mujer en la Luna 1929).
Eventualmente, a principios del Siglo XX, el ser humano logró vencer esa primer barrera y llegó a realizar los primeros vuelos en avión con éxito. Históricamente, el crédito se lo pelean los hermanos Wright de Estados Unidos y el brasileño Alberto Santos Dumont (quién fue homenajeado en la ceremonia de inauguración de los recientes Juegos Olímpicos Río 2016).
Foto: Plaza al frente del museo Santos Dupont. Petrópolis, Rio de Janeiro, Brasil. Archivo fotográfico VM 01/2015.
Pero el cielo no iba a ser el límite para esta curiosa especie. Las tecnologías relacionadas con la aviación tuvieron un desarrollo categórico a mediados del siglo XX debido a la carrera espacial, la competencia por la exploración del espacio entre Estados Unidos y la Unión Soviética durante la Guerra Fría.
En el año 1957, una representante de "los mejores amigos del hombre" allanó el camino para que los humanos llegaran al espacio. Laika, una perra sin hogar de las calles de Moscú, se convirtió en el primer ser vivo en orbitar la Tierra.
Corría el año 1961 cuando Yuri Gagarín se convirtió en el primer humano en el espacio, así creando una nueva estirpe: Los astronautas. Pronto lo seguiría Valentina Tereshkova, la primera mujer en el espacio, en 1963; y Neil Armstrong, el primer humano que caminó en la Luna, en 1969.
Aunque hoy en día el término astronauta frecuentemente se aplica para cualquier persona que viaje al espacio, por lo general se reserva para los profesionales que se entrenan para esta labor.
El término astronauta viene del griego antiguo ἄστρον (estrella) y ναύτης (marinero), queriendo decir navegante del astro. También se utilizan los hipónimos cosmonauta (космонавт) para referirse a los astronautas de Rusia y algunos países de Europa del Este; taikonauta (太空人) para los astronautas Chinos; y espacionauta (spationaute) para los viajantes de Francia.
Adicionalmente, en el 2004 se acuñó el término astronauta comercial para referirse a cualquier persona que viaje en una nave espacial con fondos privados a raíz de SpaceShipOne, el primer vuelo espacial privado.
Esta entrada es apenas un abrebocas para invitarlo a usted, estimado lector, a que siga aprendiendo sobre la historia de la exploración especial y que continúe pendiente de los sorprendentes avances en esta área tan prometedora. Como especie, ya logramos volar, salir al espacio y llegar a la Luna. ¿Cuál (y cuándo) será el siguiente gran paso?
Referencias:
http://www.space.com/4422-timeline-50-years-spaceflight.html
http://old.themoscowtimes.com/news/article/a-brief-history-of-russias-animal-cosmonauts/546803.html
https://es.m.wikipedia.org/wiki/Historia_de_la_aviación
https://en.m.wikipedia.org/wiki/Astronaut